Caminar 30 minutos todos los días es más beneficioso para el cuerpo y la mente de lo que imaginas. Los beneficios de esta práctica sencilla y fácil van desde la reducción de la tensión arterial, el aumento de la creatividad hasta la pérdida de peso.

Esto es lo que puede esperar cuando empiece a caminar 30 minutos cada día:

Beneficios de caminar 30 minutos al día

Aumenta la creatividad

No importa si te sientes atascado en el trabajo o buscas una solución a un problema peliagudo: es una buena idea ponerse en movimiento. Según un estudio de 2014 publicado en la revista estadounidense Journal of Experimental Psychology, Learning, Memory and Cognition, dar un paseo puede potenciar la creatividad. Los investigadores administraron pruebas de pensamiento creativo a los sujetos mientras se sentabany caminaron y descubrieron que los caminantes pensaban de forma más creativa que los demás.

Caminar 30 minutos mejora el estado de ánimo

¿Alguna vez has tenido que tomarte un vaso de vino o comer chocolate después de un día duro? Caminar es una alternativa sin calorías con los mismos beneficios.

Esto se debe a que actúa directamente sobre el sistema nervioso, reduciendo sentimientos como la ira y la hostilidad. Además, al caminar por la calle te cruzas con vecinos, amigos o conocidos. Esta interacción te ayuda a sentirte conectado, mejorando tu estado de ánimo.

Quema calorías y ayuda a perder peso

Caminar con regularidad puede ayudar a mejorar la respuesta del cuerpo a la insulina, lo que ayuda a reducir la grasa del vientre. El entrenador personal Ariel Iasevoli añade que caminar todos los días es una de las formas eficaces de bajo impacto para quemar grasa: "Aumenta el metabolismo mediante la quema de calorías adicionales y la prevención de la pérdida de músculo, que es particularmente importante comoque nos hacemos mayores", afirma.

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Reduce el riesgo de enfermedades crónicas

La Asociación Americana de la Diabetes afirma que caminar reduce los niveles de azúcar en sangre y el riesgo general de diabetes. Investigadores de la Universidad de Boulder (Colorado) y la Universidad de Tennessee, ambas en Estados Unidos, descubrieron que caminar con regularidad reduce la tensión arterial hasta 11 puntos y puede disminuir el riesgo de ictus entre un 20% y un 40%.

Uno de los estudios más citados sobre caminar y salud, publicado en el New England Journal of Medicine, descubrió que quienes caminaban lo suficiente para cumplir las pautas de actividad física (30 o más minutos de actividad moderada cinco o más días a la semana ) tenían un riesgo un 30% menor de sufrir enfermedades cardiovasculares en comparación con quienes no caminaban con regularidad.

Caminar 30 minutos mejora la digestión

Una rutina regular de paseos puede mejorar mucho el tránsito intestinal. Una de las primeras cosas que se le pide a un paciente de cirugía abdominal, por ejemplo, es que camine, ya que utiliza los músculos centrales y abdominales, estimulando el movimiento en el sistema gastrointestinal.

Protege las articulaciones

Caminar durante 30 minutos aumenta el flujo sanguíneo a las áreas tensas y ayuda a fortalecer los músculos alrededor de las articulaciones. De hecho, la investigación muestra que caminar durante al menos 10 minutos al día - o aproximadamente una hora a la semana - puede prevenir la discapacidad y el dolor de la artritis en los adultos mayores. Un estudio de abril de 2019 en la publicación American Journal of Preventive Medicine siguió1.564 adultos mayores de 49 años con dolor articular en la parte inferior del cuerpo. Se pidió a los participantes que caminaran durante una hora a la semana. Los que no caminaban al menos una hora a la semana declararon que caminaban demasiado despacio y tenían problemas con su rutina matutina. Mientras que los participantes que seguían una rutina de caminar tenían mejoresmovilidad.

Promueve la longevidad

Un estudio publicado en el Journal of American Geriatrics Society demostró que los adultos mayores, de entre 70 y 90 años, que salían de casa y eran físicamente activos vivían más que los que no lo eran. Mantenerse activo también ayuda a permanecer conectado con seres queridos y amigos que pueden proporcionar apoyo emocional, lo que es especialmente importante a medida que se envejece.

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